miércoles, 20 de enero de 2010

PIGS: Portugal, Italy, Greece and... Spain

España pluraliza tan despectivo calificativo que la Europa desarrollada provee a esos países que, de alguna forma y a su juicio, lastran el deseo de disputa de la primacía política y económica a Estados Unidos, China y Japón. Curiosamente no existe un término similar para otros "socios comunitarios" con, digámoslo, menos capacidad contributiva, o para cualquier otra región del mundo, pero estos países, entre los que se encuentra España, merecen ser llamados "cerdos".

Me gustaría centrarme en el caso de España, por aquello de que soy y me siento español y, quisiera analizar si tenemos, o dejamos de tener, lo que se necesita para pertenecer a tan selecto grupo.

España, desde hace días y porque no toca,preside la Unión Europea. Nuestro Presidente se ha creído que se trata de un honor concedido, y no se percata de que simplemente se trata de una obligación por turno. Durante esta presidencia, como era de esperar, nuestro Presidente tiene el mejor escaparate para darse a conocer. Con sus propuestas, pretende aparecer en foros y reuniones que, de otra forma que no fuera por turno, hemos sido excluidos, y el colmo es que, para hacerse el ocurrente, el interesante, el imaginativos, pretende tomar medidas y, claro, ante los resultados que sus medidas han obtenido en España, los europeos, vamos, los centroeuropeos, han pasado de la perplejidad a la carcajada, y de ahí al enojo y el insulto. Alemania todavía trina por las medidas salvadoras en materia económica que Zapatero quiere impulsar.

Miremos, pues hacia adentro, hacia España, y qué encuentro. Una amalgama de disparates nacionales. Empecemos por el último discurso del Rey para felicitarnos la Navidad (dentro de poco nos felicitará las fiestas de invierno), en el que instaba a los partidos mayoritarios a que pacten, ente la grave crisis en la que nos encontramos. El Rey no debe haber leído la Constitución o ya no la recuerda, pero la obligación de la oposición no es proponer medidas ni pactar, sino decir qué haría si estuviera en el poder y controlar la acción del Gobierno y además hacer oposición (será por eso que la llaman así). Teniendo en cuenta que, durante los años en que Zapatero es Presidente, hasta por escrito (Pacto del Tinell) el PSOE se niega a pactar con el PP en cualquier parte de España y que sistemáticamente el PSOE se ha negado a admitir ninguna propuesta del PP, se hace incomprensible o, peor, indignante que, el Jefe del Estado llame a consenso. Por otro lado, si se quiere que para los asuntos importantes pacten los principales partidos, tan fácil como exigir mayorías cualificada en el Congreso (dos tercios, tres quintos, etc), pero ni en Educación, ni en la Ley de Presupuestos, ni la Ley electoral se requieren mayorías cualificadas... ¿Pacto, qué pacto? Yo ya me he pronunciado a favor de que deteminados temas sean de obligado consenso, por ejemplo la educación, y sacarlo de la lucha electoral, pero no del debate político. Tan fácil como exigir que las reformas educativas requieran mayorías cualificadas. Igual que la Ley electoral, las leyes de financiación autonómica, las leyes de recursos naturales y energéticos, las leyes en materia de seguridad social, etc. Solo la reforma constitucional,que tanta falta hace, requiere esa facultad de pacto.

Precisamente en materia de medidas económicas, el Gobierno y el partido que lo sustenta deben gobernar, la oposición controlar y el pueblo decidir si está de acuerdo o no con la política desarrollada. En materia laboral, el Gobierno se afana en hablar con "los agentes sociales": sindicatos y patronal. ¡ Hala, a la mierda la oposición y el debate parlamentario!

Pero creo,que en Europa nos tienen esa tirria porque ven cómo lideramos las relaciones exteriores en España: con Marruecos, América Latina, los piratas senegaleses... Bueno, y ahora a ayudar a Haití. mientras se ponen de acuerdo en qué foto hay que sacar y cuál es el perfil bueno de Zapatero, Estados Unidos ya ha actuado y ya está salvando vidas; directamente, sin tapujos ni milindrerías, asuminedo su rol en el mundo. Ése que el resto del mundo le ha dejado tener en tantas otras ocasiones.

Al menos podemos mejorar nuestra imagen en Europa con el festival de Eurovisión. ¡Oh, no, Karmele Marchante! ¿En qué país vivimos? ¿Será cierto que somos PIGS?

No hay comentarios: